27 de abril de 2014

Mis películas preferidas II

El escritor

De Polanski ya conocíamos la claustrofobia, pero jamás con este lenguaje. Los ambientes malsanos de El quimérico inquilino o Rosemary's baby poco tenían que ver con esta película actual, uno de los últimos trabajos del director parisino, si bien todas estas películas guardan en común el acoso al individuo y dicha claustrofobia. Tal y como suele hacer, se dispuso a trabajar en un material ajeno, en este caso la novela En la sombra del poder de Robert Harris, y no sólo eso, sino dar el valiente paso de trasladarlo a un escenario inestable donde los paralelismos con la situación post 11-S son evidentes, en especial la crítica a la clase política dirigente. Además, cuenta con uno de los castings más acertados vistos en la gran pantalla. 

Cría cuervos

Las dos primeras películas de Ana Torrent se cuentan entre mis preferidas del cine español. Cría cuervos me trae buenísimos recuerdos y me reconcilia con el feísmo de un cine español que vivía una transición tan valiente como es esta cinta que, testigo del cambio, cuenta esta historia inquietante sobre una niña que se cree con poder sobre la vida y la muerte. Enorme el conjunto de detalles que la componen, desde el tema de Jeannette que suena a lo largo de toda la cinta a una estupenda Geraldine Chaplin que encarna a dos personajes. Puede tratarse ésta de la película más bella y terrible de Carlos Saura.

Olvídate de mí

Supongo que, harto de las comedias románticas de final feliz, me aficioné a cualquier película que defendiera una tesis contraria: la del amor que no triunfa. La imaginación de ese monstruo del guión que es Kauffman al servicio de ese artesano de la dirección que es el francés Gondry y la extaña pareja con los rostros de Kate Winslett y Jim Carrey nos regalaron una de las películas más inventivas, desoladoras y hermosas del siglo. Eternal sunshine of the Spotless Mind, el título original, es un verso de Alexander Pope.

Memento

Uno de mis primeros recuerdos cinematográficos más intensos es el de la primera vez que vi esta película de Christopher Nolan antes de Batman y de que lo engullera el hype que acabó por hacerlo previsible y aburrido. El hecho de contar con un guión que constituye la piedra angular de la película supongo que me tocó hondo, por mucho que los años me llevaran a reconocer que dicha premisa carecía de la inventiva que yo le había supuesto. No obstante, la firmeza de las interpretaciones y, por qué no, la falta de concesiones con el espectador, sigue haciendo de Memento una de las películas que más disfruto en cada revisionado.

Matar un ruiseñor

No es por nada la novela de Harper Lee una de mis preferidas en la historia universal de la literatura, pero además esta adaptación se trata sin lugar a dudas de la mejor traslación entre ambos medios que se ha llevado a cabo. La película, filmada un año después de la publicación del premio Pulitzer, consigue capturar todo lo que hacía grande a la novela: el ambiente sureño, la inocencia de la narradora y la figura heroica de un Atticus Finch ya indisoluble del inefable Gregory Peck. Sea como sea, esta película consigue emocionarme una y otra vez, y pasan los años pero mantiene la frescura de todos los clásicos universales.

3 comentarios:

  1. Una buena lista, poco convencional.

    La de To kill a Mockingbird es, acorde a los comics, la peli favorita de Superman, de hecho.

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